Ir al contenido principal

Deseo

Tú que me quitas el pensamiento
y me abrumas con tu dulce figura
que escondes tras esa dura imagen
espectante, ansioso, deseoso.

Quiero conocerte e internarme en tu mente
lanzarme al vacío y encontrarte
y que me mires diciendo
bésame, tócame, siénteme.

Flotando en la nube del inicio amoroso
intentando en vano despertar
intimidado por caer rendido al sentimiento
ahogado, atontado, enamorado.

Tú me impides tenerte
y te abalanzas para que te quiera
pero me niego rotundo
diferencia, igualdad, confusión.

Si no fuese un digno cobarde
todo sería distinto
mas solo necesito que me digas
ven, acércate, eres lo que deseo

Comentarios

Entradas populares de este blog

Improvisa

Emerge tu recuerdo de la tierra que piso dueña de aquellas hojas y del otoño marchito. Marchito es como deseo que esté mi sentimiento oculto en el follaje de mi mente de olvido. De olvido es mi vida de un suave y dulce invierno que espera por siempre dejarme dormido y en paz.

De par en Tamentica.

No quiero escribir ni esencias ni yerbas, porque reducido al papel aun no me encuentro. Esperar, sentir, vibrar, gritar, llorar, pensar, querer, desear...  vivir. Es extraño, sí que lo es, cuando mis cristales penetran los tuyos y tu carne se acerca a la mía en una danza de humo y bebida con voces de luces a oscuras en un cuarto más frío que el mio con fotografías de pantalla en corrida descalzos, cercanos, lejanos. Me recuesto con el deseo y te inscribes como necesidad beber tus aguas, tu edén recorrer calma mi hambre con caricias y calla mi deseo de un beso porque después de mañana las cosas no serán ni descalzas ni cercanas, ni siquiera lejanas porque la no existencia consume más allá de las fronteras de tu alma con la mía consume la vida y la muerte consume lo que es, lo que podría ser y lo que nunca será. Dos más dos son cuatro, pero uno más uno jamás serán dos.

Licor callejero

¿Recursos poéticos o el don de lo absurdo? Me inquieta pensar por las noches que mi vida toda no existe Que siempre tuve amor, mas nadie lo quiso para si En el tormento de la vida que inquieta a la muerte Así están mis pensamientos aunque ya no quiera verte Y un día cualquiera, de alcohol y sentimientos me emborraché Me perdí por la suciedad de las calles de frío asfalto Robáronme casi todo lo que de valor llevaba Mas ellos no sabían que el amor era lo que más me importaba Marcas en mi cuerpo dejó aquella noche Pero ninguna es comparable a lo que ustedes me hicieron sentir No recuerdo qué ni cómo sucedió todo Solo sé que cuando recuerdo, el d olor ya no se puede borrar Mi alma no se vacía, porque mi corazón he vuelto a parchar .